jueves, 1 de marzo de 2012

La acción creadora

                                          Por Juan Carlos Badía. Ref. "pequeña meditación terrestre"
El Dios creador es permanentemente actual. Está permanentemente creando, en cada acto creativo que participamos.
En cada acto tenemos todo un universo de posibilidades creativas.
El mundo puede cambiar totalmente en un acto.
En él tenemos toda las opciones de la creación que se presentan en el escrito que comentamos: desde una creación ex nihilo a una creación reproductiva o clonadora.
En cada acción saltamos ese abismo originario de la creción, y lo resolvemos en una fórmula creativa que es en alguna manera reproductiva y en alguna manera absolutamente original.
Toda acción tiene componentes de ambas creaciones.
En un sentido, cada acto de vida es absolutamente original.
La vida de una sóla célula, aparentemente igual a millones de células, tiene al mismo tiempo un sentido propio y especial, es un accidente único en el Universo y es toda una posibilidad de mutación, que puede sanar, enfermarse, transformarse, morir, renacer, aprender y evolucionar.
A medida que encarnamos tenemos mayor cantidad de procesos repetitivos.
Y el hallar fórmulas de éxito supervivencial da una base importante para la repetición.
Por ello gran parte de la creación es también clonación que es el otro polo de la acción creativa.
Es decir que tenemos al mismo tiempo un clon que puede ser original.
La mutación es la variación del clon.
Darwin dice que la mutación genética se rige por el azar y que la naturaleza, el éxito vital, se encarga de la selección.
Es decir que lo que sobrevive triunfa y se clona.
Pero es, tal vez, una mutación puntual la que termina salvando una especie. Tal vez una cualidad de sus tegumentos o una manera de conducirse.
Es decir que permanentemente estamos insuflando en el clon, el origen.
El clon es una tabla sobre la que escribe la novedad de la vida.
Es decir que en nuestra libertad tenemos toda la potencialidad creativa.
Nosotros podemos variar en cada acto. Podemos introducir el misterio del Universo, la metáfora, la interpretación, la virtualidad, la originalidad, en cada uno de los actos.
En nosotros está la decisión de la creación. En la interpretación que efectuemos del Universo Todo, que concurre al centro galáctico de nuestra conciencia a tomar su oportunidad de ahora.
Y de esa oportunidad actual el Universo ha resultado creado, parecido tal vez al de la encarnación del instante anterior, pero esencialmente mutado, distinto, optado, elegido, evolucionado, transformado.
Por ejemplo, la simple lectura del hermoso texto que comentamos nos va pasando de pensamiento en pensamiento concibiendo universos posibles en una transformación creativa y actual de la conciencia.
Yo puedo decir que ha tenido en mí la fuerza de moverme a escribir hoy aquí y me ha dado un sentido de interlocución que necesitaba.
Ese punto es totalmente creativo y en él se articula creación.
En el texto escrito, la letra es el clon más repetitivo. A esos fijos clones tipográficos los combinamos en los clones mas flexibles de las estructuras gramaticales, y sobre esos niveles significantes articulamos el significado que es potencialmente único y actual y que muta y en esa unicidad renueva totalmente hasta la reedición de cada letra que interviene.
El Sentido es la gravedad, la materia cohesiva del universo simbólico.
Construímos galaxias del sentido, soles que nacen.
Articulamos conceptos en una acción de comprensión que nos está llevando a ver este acto-actual de escribir-leer que estamos siendo ahora, como una posibilidad absoluta de situación original y novedosa, imprescindible y necesaria, de la Conciencia, del Espíritu, del Ser, de Dios, del Buda.
                                                                                            

1 comentario:

  1. Muchas gracias, amiga Verónica, por situar en una entrada mi comentario a tu bello trabajo "pequeña meditación terrestre".
    Acabo de releerlos a ambos y, cuando llegaba al final del comentario, me parecía que debía agregarle una ejemplificación más que, si bien, de alguna manera, ya está contenida allí, no está, sin embargo, totalmente expresada.
    Para ayudar a identificar en lo simbólico esa materia novedosa y original del Universo me parece interesante encontrar, en la propia lectura del texto que comentamos, un instrumento de ejemplo.
    Porque, si vamos tener en cuenta un nivel de significación real y profundo, díganme ustedess ¿Quién podría quedar exactamente igualito que antes después de terminar de leerlo y, medianamente, haber entendido el tema y la posición que propone para la conciencia?.
    Ese movimiento, ese plus, esa lamparita que se enciende, esa metáfora que comienza a brillar, son los lugares en donde se posa la musa en nuestra red almática.
    Es el lugar en donde en la lámpara se produce el fenómeno actual de la iluminación.
    Estamos moviéndonos en un mundo de clones y de letras, pero en el que un significado que conmueve la conciencia puede mover y redimir de toda igualdad y repetición a todas las letras de la web.
    Por último, resalto el nombre de meditación "terrestre" con que figura el artículo en su texto original porque encuentro que acerca el lugar en donde se produce el chispazo creativo al nivel de la encarnación terrestre y planetaria, que es el lugar actual de situación de la conciencia creativa que nos consta indudablemente.

    Un calido abrazo

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